A instancias de la Sociedad Colimense de Estudios Históricos, A.C., que por acuerdo adoptó la propuesta hecha al pleno por el consocio, el historiador José Oscar Guedea Castañeda, Premio Colima en humanidades, desde el año pasado fue incluida en “el Grito” la mención de insurgentes de Colima. Fue durante la última ceremonia que encabezara el exgobernador, Silverio Cavazos, cuando por la agrupación le fue presentada la propuesta, acompañada de un listado fundamentado de nombres de personajes nominados por consenso. Como resultado, el mandatario estatal incluyó al final de la tradicional arenga: ¡Vivan los insurgentes colimenses!
Este año, con la intermediación del Secretario de Cultura, Rubén Pérez Anguiano, se replanteó la posibilidad y fue aceptada, por lo que por primera vez un gobernador del Estado, Mario Anguiano Moreno, mencionó a los personajes fundamentales de dicho pasaje en Colima, como José Antonio Díaz, amigo de Hidalgo desde el Colegio, amistad refrendada en Colima durante la estancia de Hidalgo -del 10 de marzo al 26 de noviembre de 1792-, para después seguirlo desde Almoloyan y la Villa de Colima sublevándose a favor de la insurgencia y resultar distinguido por Hidalgo como “Proveedor general del ejército insurgente”; y, años adelante, ser designado por Morelos orador del sermón de la Constitución de Apatzingán.
Igual que ellos, que Hidalgo y Díaz, también fueron vitoreados y replicados por los miles que esa noche del Grito se dieron cita en el jardín de La Libertad, este año del bicentenario, en voz del mandatario estatal los otros insurgentes que desde Colima se hicieron presentes en el movimiento: ¡Colimenses, viva Hidalgo!, ¡Viva Morelos!, ¡Viva doña Josefa Ortiz de Domínguez!, ¡Viva Guerrero!, ¡Vivan Allende y Aldama!, ¡Vivan los colimenses que se sumaron a la insurgencia! ¡Viva don José Antonio Díaz!, ¡Vivan los Regalado!, ¡Viva don Ignacio Sandoval!, ¡Viva el bicentenario de la Independencia!, ¡Viva Colima!, ¡Viva México!, ¡Viva México!, ¡Viva México!
Este gesto sensible del Gobernador del Estado es una justa expresión a favor de la memoria de aquellas mujeres y hombres que con entrega y sacrificándolo todo dieron su vida por los ideales de libertad e Independencia que nos heredaron. Es deseable que en lo sucesivo esta expresión de voluntad y pertenencia sea imitada por el resto de autoridades, especialmente escolares y de los ayuntamientos, ya que con ello estarán fortaleciendo nuestros valores de identidad y reconociéndose en nuestro origen como nación.
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