*Por Alfredo Cesar Juárez Albarrán, Sociedad Colimense de Estudios Históricos A. C.
Compositor, poeta y músico de gran prosapia, nació en Atoyac, Jalisco, en enero de 1858; durante los primeros años de su juventud estudio y vivió en Guadalajara, pero por sus ideas políticas tuvo la necesidad de radicar en la ciudad de Colima, nuestro terruño, que lo arropó por varios años, aquí fue en donde desarrolló gran parte de su producción musical y poética, murió en 1892 a los 34 años de edad. Por su “verbo”, simpatía e inteligencia pronto fue aceptado por la rancia aristocracia colimense de la época, quienes lo escuchaban y aplaudían en tertulias, sepelios, inauguraciones y eventos oficiales.
Hizo grandes amigos entre los intelectuales colimotes, sus contemporáneos, algunos de ellos han dedicado varios escritos que lo ensalzan y lamentan su pronta partida sin regreso. Fue “un gran amigo de sus amigos”, degustaba todo tipo de “bebidas espirituosas” y en más de una ocasión en los mejores convivios sociales lo sacaron como se dice en el argot “de cantarito”, pero todo se le perdonaba por su simpatía y atracción para sus contertulios. Estuvo enamorado de más de una damita de la localidad, a quienes dedicó amorosos versos, sobre todo a una de ellas, pero con ninguna contrajo matrimonio, sin embargo, es conocido tuvo dos hijas.
Arcadio, además de bonitos sonetos, escribió letra y música de: “La Barca de oro”, “Hay unos ojos”, “La golondrina”, “La serenata”, “Las palmas”, “Lejos de ti”, “Los turbiones”, “Quiero soñar, “Sueño del alma”, etc.
Fue sepultado en el panteón municipal de Colima capital, y después de varios años de infructuosos trámites para trasladar sus restos a su tierra natal, un grupo de prominentes ciudadanos de Atoyac, prácticamente “robó” dichos restos mortales y los trasladó a un mausoleo elaborado con gran esmero y calidad estética en el panteón de Atoyac. Sitio que a invitación de intelectuales y las autoridades de dicha población visitamos varios miembros de la Sociedad Colimense de Estudios Históricos y Cronistas de Pueblos y Ciudades del Estado de Colima; la noche previa en el auditorio municipal presenciamos la conferencia del historiador radicado en Colima, Juan Carlos Recinos, sobre vida y obra poética del autor en mención, entre otras brillantes participaciones como la del cronista de Colima Abelardo Ahumada y la del director del Archivo Municipal de Atoyac, profesor Eduardo Ramírez Ruelas.
Disfrutamos tanto de las palabras de Recinos con el fondo musical de La Barca de Oro, que como presidente de la Sociedad Colimense de Estudios Históricos decidí pedirle el favor de que repitiera su conferencia ante todos nuestros consocios e invitados especiales.
Dentro de la serie 2022 de lo que hemos llamado mes a mes Charlas Colimotas la programamos para el día 28 de abril del presente año a las siete de la noche en nuestra sede del Archivo Histórico del Estado de Colima, en la parte sur del Jardín Juárez, mejor conocido como de La Concordia. Esta conferencia se llama “El amor, lo místico y lo cotidiano en los sonetos de Arcadio Zúñiga y Tejeda”
Como colofón debo mencionar que dicha platica será la que servirá de marco para que Juan Carlos Recinos se integre como nuevo socio de nuestro colectivo. Y siguiendo nuestro lema de INVESTIGAR, PRESERVAR Y DIFUNDIR la Historia, la invitación a esta charla es abierta a la sociedad colimense.
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